En Afganistán, el Ministerio para la Propagación de la Virtud y la Prevención del Vicio, dirigido por Khalid Hanafi, ha implementado restricciones que prohíben a las mujeres hablar en voz alta entre sí.
Además, estas normativas limitan la recitación de oraciones islámicas, como el Takbir y la lectura del Corán, en voz alta, lo cual ha suscitado preocupación entre activistas, quienes ven en estas medidas un avance de las restricciones impuestas a las mujeres tras el regreso de los talibanes al poder.
Hanafi, quien se encuentra sancionado tanto por la Unión Europea como por la ONU, hizo pública una declaración de audio en la que instruye a las mujeres adultas a evitar recitar ciertas oraciones en voz alta en cualquier entorno público.
Según el funcionario, estas limitaciones buscan regular la expresión de las mujeres en todos los espacios, bajo el argumento de preservar las normas culturales y religiosas establecidas por el ministerio. Estas nuevas normas afectan principalmente a trabajadoras en áreas como la salud, quienes han expresado las dificultades que enfrentan.
Samira, una partera en Herat, comentó que las restricciones han cambiado las interacciones en su lugar de trabajo. Desde hace algunos meses, según explica, se ha incrementado la supervisión y se les prohíbe dirigirse a familiares varones de los pacientes, además de limitar su comunicación en los puntos de control durante su traslado.
El ministerio también ha reforzado la normativa que exige a las mujeres cubrir completamente su cuerpo, incluyendo el rostro, con estas nuevas disposiciones ampliando el control incluso sobre sus voces en la esfera doméstica. Activistas han señalado que estas políticas forman parte de una estrategia que restringe cada aspecto de la vida cotidiana de las mujeres, impidiéndoles participar plenamente en la sociedad afgana.
Una activista declaró: «Estas políticas hacen que actividades cotidianas como comprar alimentos, acceder a atención médica o cumplir con sus roles familiares sean prácticamente imposibles para muchas mujeres en el país».