Los hermanos Apodaca Estrella visitan la lápida de su madre Gloria, su padre José, el abuelo Alejandro y demás familiares que han fallecido, a quienes les llevan siempre flores rojas.
Desde muy temprana hora las hermanas Gloria y Fernanda provenientes de Phoenix, Arizona y su hermana Rosa Irene llegan a regar y colocar los ramos de rosas y gladiolas rojas naturales y artificiales en cada una de las lápidas de esa capilla en el Panteón No. 1 donde están sepultados , el abuelo, los papás, la nuera, hermanos y un sobrino.
Para la familia Estrada Apodaca ir al panteón el día de muertos es una importante tradición pero sobre todo una costumbre que les dejó su mamá Gloria Estrella a quien siempre le gustaron las flores rojas y que nunca la dejaran en el olvido.
“Mi mama nos decía cuando íbamos a visitar a mi hermano al panteón, levántense desde las 6:00 de la mañana y ahora nos estábamos acordando de eso temprano, ella siempre nos dijo que quería puras flores rojas y no le gustaba el olvido, quiso que siempre hubiera flores” recordó su hija Fernanda Apodaca Estrella.
La tradición se ha pasado también a los nietos y bisnietos que pasan con la familia todo el día de Muertos en la capilla familiar, ahí comen, conversan y compran de todo lo que les ofrecen los vendedores de alimentos.