El cielo nos tiene acostumbraos a toda una serie de fenómenos curiosos y llamativos.
Suelen verse cómo una especie de relámpagos de color rojo, hacen su aparición en el cielo. Tienen una duración inferior al segundo, lo cual los convierte en un tipo de producto meteorológico muy específico.
Se trata de un fenómeno que deberían captar en más ocasiones para disfrutar de su belleza y, por supuesto, hasta qué punto nos encontramos ante una escena peligrosa.
Sprite o espectro rojo, un relámpago bonito, pero que no caemos en él. Este tipo de relámpago se distingue, sobre todo, por ocurrir a mucha más altitud, ya que se produce por encima de las nubes en tormentas intensas en la parte de la atmósfera denominada mesosfera.
Pese a los que puede parecer en la imagen anterior, se han registrado relámpagos de esta clase con una longitud de hasta 50 kilómetros, lo cual viene a destacar el increíble tamaño que puede tener este tipo de tormentas. De igual manera, puede ocupar, también, un rango entre 30 y 50 kilómetros de altitud.
La Universidad de Alaska, gracias a la tenencia de un tipo de tecnología especial, consiguió tomar fotografías sobre este curioso fenómeno meteorológico. Posteriormente, un fotógrafo, gracias a un equipo de reproducción de alta definición, fue capaz, también, de captar el momento exacto en el que se producía este curioso efecto luminoso.
