El licenciado en derecho Julio César Miranda Cobián, a quien se le vincula con el cártel de Los Salazar, brazo operativo del Cártel de Sinaloa, fue asesinado a balazos en calles de San Luis Río Colorado, Sonora.
Los hechos se registraron la mañana del lunes, cuando el abogado se encontraba al volante de un vehículo por la avenida Álvaro Obregón, en plena cabecera municipal.
Cuando Miranda Cobián se hallaba en el estacionamiento de una farmacia, fue interceptado y atacado a balazos por sujetos armados, quienes le dispararon en múltiples ocasiones, para luego darse a la fuga.
En el asiento del piloto murió el abogado, que recibió al menos una decena de impactos de bala. A él se le señala como el encargado de interceder de manera corrupta ante las autoridades, para liberar a miembros de Los Salazar detenidos, además de ser encargado de distribuir sobornos a mandos policiacos.
Los Salazar son un grupo que opera desde la década de los 90 en Sonora, pero sus integrantes son originarios del municipio de Chínipas, Chihuahua. El líder fundador es Adán Salazar Zamorano, narcotraficante que por poco más de dos décadas, y hasta su detención en 2011, fungió como el principal productor y distribuidor de mariguana en la región del Valle del Mayo, con centro de operación en la ciudad de Navojoa.
Actualmente el grupo es liderado por Crispín Salazar Zamorano, hermano de Adán (actualmente preso), principal operador del cártel de Sinaloa en la franja de Sonora y Chihuahua, frontera con Arizona, Estados Unidos. Uno de los corredores de la droga identificado por las autoridades mexicanas y norteamericanas.