Al menos 80 personas murieron y 150 resultaron heridas tras un bombardeo de Estados Unidos efectuado este fin de semana contra el puerto petrolero de Ras Isa, en Yemen.
Las autoridades locales y medios controlados por los hutíes informaron que el ataque es “el más letal desde que Washington inició sus operaciones militares” contra ese grupo en enero de 2023.
El gobierno estadounidense señaló que el objetivo fue debilitar la base económica de los hutíes, quienes controlan gran parte del territorio yemení, incluida la capital Saná.
El portavoz del Ministerio de Salud del grupo, Anees Alasbahi, indicó que “continúan las labores de rescate y que la cifra de víctimas podría aumentar”.
En respuesta, los hutíes anunciaron ataques con misiles contra Israel y afirmaron haber lanzado ofensivas contra los portaaviones estadounidenses Harry S. Truman y Carl Vinson, ubicados en las costas del mar Rojo.
El ejército israelí informó que logró interceptar un misil proveniente de Yemen, sin registrar daños.
El grupo inició su ofensiva en apoyo a la población palestina en Gaza, y ha dificultado el tránsito marítimo por el canal de Suez, obligando a navieras a tomar rutas más largas.
El bombardeo en Ras Isa ocurrió en vísperas de una reunión entre representantes de Estados Unidos e Irán en Roma para tratar el programa nuclear iraní.
