Recuerdan a mujeres victimas de violencia

Con motivo del Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra la Mujer,  que se conmemora el 25 de noviembre, el señor Rodolfo Rico Villalobos, padre de Laura Elizabeth, compartió como ha sido su duelo a meses de haber ocurrido el feminicidio de su hija.

“Quiero que sepan que no es nada fácil, pasar, ni olvidar está pena y no, no me quiero hacer, ni jamás me he hecho el pobrecito, porque el sufrimiento y la pena se siente en el alma, yo si sonrió y le hecho ganas a salir adelante pero hay veces que me quiebro y me pongo a llorar por mi hija y más en estos días de fiestas”, explicó.

Además, recalcó “ayer por accidente andaba buscando unos papeles y me encontré con la declaración del detenido que participó en la muerte de mi hija, fue el que traía manejando el carro ese fatal día y alcance a leer parte de lo que escribió criminalística de la forma que le quitaron la vida y me dio tanta tristeza, frustración, coraje y odio, me la hicieron pedazos estos hijos del demonio. Mi hija no merecía esa muerte tan horrible esa saña con que le arrebataron su vida”.

“Mendigos cobardes, desgraciados, que Dios los perdone dónde quiera que estén, ya que yo también ya lo hice y también perdone a este tremendo demonio que está encerrado, en el juicio se lo dije, sabes que a pesar de todo te perdono por lo que le hiciste a mi hija, yo no soy nadie para juzgarte ni para envenenar mi corazón con odio y venganza y así pude tener un poco de paz y tranquilidad en mi mente, alma y espíritu”, aseguró.

Asimismo, detalló “pero como le explico a mi nieto cuando me pregunta por qué le mataron a su mami, ¿cómo murió su mami?, y cuando estamos en la iglesia y llega el momento de las peticiones a Dios, le pide a Dios que si cuando le va devolver a su mami y también pide que ningún niño se quede sin mamá como él. Díganme cómo decirle a mi alma que no sufra, que no llore ,que se olvide de todo , díganme por favor”.

“Ni aun dejando de latir mi corazón dejaré de amar, de querer, y de extrañar a mi hija querida. Y le pido perdón por no haber estado allí para ayudarla de esas personas, que jamás les enseñaron el respeto por la vida y que solamente Dios tiene ese derecho. Yo por mi parte los perdono”, concluyó.

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Redacción
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